lunes, 29 de noviembre de 2010

Con el agua al cuello sin merecerlo

Hoy he leído bastante la prensa digital, y he observado la evolución de la bolsa estatal. En todos los ámbitos se habla de desastres. Desastre porque en Catalunya el socialismo y el pacto de Tinell (algo irracional se coja por donde se coja) se han desplomado. Desastre porque el presidente del gobierno estatal se queda en la cuerda floja en lo que a apoyo popular futuro se refiere. Desastre porque los agentes internacionales siembran todas las posibles dudas sobre la ya maltrecha economía estatal. Y claro desastre en la bolsa, en los bonos españoles y en definitiva en todo lo relacionado con la macroeconomía y, por ende, la microeconomía estatal.

¿Que es lo que le ocurre a la economía de España? Algunos apuntan a que la pertenencia al euro esta resultando muy caro para la competitividad de las empresas españolas. La verdad eso no ha quien lo aguante. Igual que la opinión cada vez mas generalizada de que esta UE esta tocada porque se hace lo que quieren los alemanes y los franceses. ¡Menos mal! Gracias al destino son los aplicados de la clase los que lideran el grupo. ¿Alguien cree que las cosas irían mejor guiadas por españoles,italianos o griegos? A las pruebas me remito. Verifiquen Vds. mismos los datos de recuperación económica de Alemania y Francia y comparenlos con los estatales... A España no le duele el euro, que nos ha salvado de un ataque despiadado de los mercados internacionales como a ocurrió en los 80 con las obligadas devaluaciones de la moneda hispana... que, por cierto, no evitaron los niveles escandalosos de desempleo e inflación posteriores. A España lo que le ocurre es que sigue siendo una economía de pandereta y botijo, con unos desequilibrios territoriales en materia de industria y productividad que no paran de lastrar las potencialidades que algunas de sus comunidades si han desarrollado. Y la pregunta que cabe hacerse no es si el euro es bueno o no, sino ¿que ha ocurrido con los miles de millones de euros de los Fondos Estructurales que de manera sistemática han recibido las regiones españolas que ahora son el caladero de parados de Europa? Esto si que es un desastre. Después de casi 25 años en la UE, hay aun regiones del sur de Europa que siguen retrasadas como entonces. ¿Y de donde venia todo ese dinero que financiaba proyectos estructurales? Precisamente de los demonios alemán y francés... Un desastre. Y por eso la bolsa, el diferencial con el bono alemán, la previsible inflación, etcétera, van contra la credibilidad de España. Nadie cree que un pais cuya base es el pelotazo vaya a salir adelante trabajando con esfuerzo. Un pais cuya historia económica es la historia de una quiebra constante vaya a ser ahora un ejemplo de austeridad. Un pais que ha malgastado millones de euros en aceras, cheques bebe, oposiciones a olimpiadas, etc. vaya ahora a ser ejemplo de buena gestión. En fin, que aunque el riesgo de rescate sea bajo, el riesgo de que el tonto de la clase suspenda, aunque no con un cero, es MUY alto. Un desastre.

Y en medio de este desastre, Euskadi se encuentra con el agua al cuello sin merecerlo. El nivel de deuda es muy bajo. El volumen de funcionarios ajustado. El nivel de competitividad e innovación comparables a los mejores países europeos. Eso si que es un desastre. Un desastre que se ve amplificado por el pacto antinatural que nos gobierna. Hoy mismo el portavoz del PP vasco, Oyarzabal, tras presentar las enmiendas a los presupuestos vascos, previamente pactadas con el PSE, indicaba que al apoyar los presupuestos (del gobierno socialista) conseguían evitar que se repitieran en el Pais Vasco (nunca Euskadi en su boca) los errores del gobierno socialista en España... ¿Alguien lo entiende? Un desastre.

Espero que mañana las noticas sean mas halagüeñas aunque lo dudo mucho. El resultado del clásico da un poco igual cuando de economía se habla, ¿o no?

Hoy comienza algo nuevo

Inicio hoy como un verdadero novato mi andadura en escribir mis reflexiones acerca de la realidad política y económica en la que estamos inmersos los ciudadanos de a pie como yo, en mi país, Euskadi (o Euskal Herria, ya que no discutiré sobre esto nunca). Y resulta que la casualidad hace que hoy el país catalán realice la proeza de dar una vuelta de tuerca adicional a las variables que condicionan el entorno político y económico en el que vivimos inmersos. Hoy ha ocurrido algo realmente interesante: el nacionalismo catalán y el nacionalismo español están de acuerdo en algo, ambos han ganado. Me explico.

Los primeros han conseguido dar un salto hacia adelante, consiguiendo mas de un millón y medio de votos, mas de un 48% del censo, nada mas y nada menos. Han conseguido transmitir la imagen de un pueblo que ahora reclamara mas autogobierno y soberanía a un Estado cada vez mas cercado. Artur Mas ha recogido un paquete difícil de gestionar, una Catalunya que le reclamara salir de una crisis global que no podrá solucionar solo y a su vez, muchos votantes con sentimientos encontrados. Votantes de ERC descontentos con un partido nacionalista que se ha ido diluyendo en el ejercicio del poder, descabezando a los que le ayudaron a llegar allí. Votantes socialistas que esperan que la tradicional buena gestión de CiU les de una oportunidad de salir del paro y de un futuro desesperanzador. No es tarea fácil de gestionar. Ni mucho menos.

Los segundos, los del PP y Ciutadans, están eufóricos. Sus resultados son los mas abultados de la historia democrática catalana. No obstante, ellos piensan en clave estatal. Nada les importa una Catalunya contra cuyos deseos de autogobierno han empujado constantemente. Tras el varapalo de que los nacionalistas vascos les quitasen la esperanza de unas elecciones en 2011, ahora todo pasa por el acoso y derribo de los resquicios socialistas a nivel estatal. Piensan que Catalunya será el primer pasito ara derribar a un ZP que ha demostrado ser una anguila política. Creen que una CiU gobernante será un martillo contra el socialista traidor. Ya veremos.

En lo que a nosotros, los vascos, nos afecta mas de cerca, el ascenso de CiU es un rayo de esperanza en los nubarrones que el gobierno (adefesio) del cambio nos han puesto sobre nuestras cabezas. Hay luz al final del túnel. La gente acaba por desconfiar de experimentos raros y antinatura, como era un tripartito de jacobinos, independentistas y federalistas. Aquí es mas radical aun, socialistas y neoconservadores (recordemos que el PP vasco se nutre de la derecha mas reaccionaria y conservadora del Estado, en mi vecindario de Neguri, ahora exiliados en su capital imperial) han unido sus fuerzas para impulsar... nadie sabe que. Es hora de que los vascos y catalanes nos pongamos de acuerdo en los mínimos y hagamos ver al Gobierno central que no van a poder hacer un juego de mus, descolocando ahora a los ascos para colocar a unos catalanes mas dóciles, y ya tocara luego otro cambio a conveniencia. PSOE y PP deben entender que no hay marcha atrás en las aspiraciones de soberanía popular de nuestros respectivos pueblos. Las cosas pueden estar cambiando mucho en los próximos meses y hay que saber jugar las cartas.

En primer lugar, ahora los 17 diputados nacionalistas catalanes y vascos (23 con ERC, BNG y NaBai) pueden pasar a ser un bloque de influencia importante en las políticas a adoptar frente a la crisis económica y su impacto en Euskal Herria, Catalunya y Galiza. En segundo lugar, la mas que previsible desaparición de ETA y la participación de la IA en las instituciones vascas puede hacer desaparecer algunas de las pegas antinacionalistas en el electorado de nuestros pueblos. Y eso conlleva una reflexión sobre la unidad de destino que algunos pretenden vendernos con almíbar. En tercer lugar, la explosión de la indisimulada guerra en el Sahara Occidental hará que los partidos españoles se retraten ante nuestros pueblos y ofrezcan la verdadera visión que el Estado tiene sobre la defensa de los derechos de los pueblos. Todo lo anterior, unido a la mas que previsible necesidad de ayuda de la economía española por parte de la UE, puede representar la oportunidad que tantos años llevamos esperando para clarificar la posición que queremos vascos y catalanes en este nuevo entorno político y económico.

Y termino, hoy han comenzado los cambios, mañana comienzan las gestiones. Creo que los partidos vascos y catalanes que creen en sus pueblos tienen el deber de cooperar para avanzar hacia el objetivo final. Lo contrario volverá a llevarnos a dar la mano al acompañante no adecuado. Los cantos de sirena empezaran a sonar mañana. Veamos que son capaces de hacer nuestros representantes.